El Señor de las tormentas
En la mitología nórdica se menciona a Thor, el dios de los truenos, relámpagos y tormentas (también considerado el dios de la guerra). Es tipificado como un hombre pelirrojo con un martillo en la mano, el cual es el responsable de producir los truenos. Era el equivalente al dios romano Zeus. Una inscripción de un misionero cristiano del siglo XI, describiendo el culto a Thor, reza: “Thor preside el aire, gobierna sobre los truenos y los relámpagos, los vientos y las lluvias, el tiempo justo y los cultivos”. Pero la Biblia nos revela con claridad quién es el que preside el aire y la tormenta, por encima de cualquier otro dios o fenómeno espiritual. “Yo Jehová, y ninguno más que yo, que formo la luz y creo las tinieblas, que hago la paz y creo la adversidad. Yo Jehová soy el que hago todo esto” (Isaías 45:6b-7) . Grande fue mi sorpresa hace unos años atrás cuando me topé con este versículo. Me encontraba ayunando por liberación de una serie de circunstancias adversas que pare